jueves, 3 de julio de 2014

No hay forma de escapar





No hay forma de escapar.

Dos pasos, son dos tras de mí,

tres se convierten en seis,

cuatro en veinticuatro,

cinco en ciento veinte

y así

hasta ocupar todos los lugares de los multiversos.



Solo para hallarme en en un pequeño rincón bajo la mesa.



Unas dulces manos atraviesan mi pecho,

buscando algo a lo que le queda poca vida.



Pasas tu lengua carrasposa por mi corazón

y siento tus colmillos hundiéndose en mi carne.

Me tranquilizo, cierro mis ojos

y, como cada vez, espero que al final

todo salga bien.



no puedo decir que no lo he aprendido.



no hay forma de escapar, no la hay.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Ahí van poetas

  Ahí van poetas que sin pala ni farol renuncian a la furtividad de la noche para atravesar las majestuosas montañas y buscar tonalida...