domingo, 12 de diciembre de 2010

Doomsday Machine


Ve la sonrisa de la mujer amada

y el mundo en ruinas a su espalda,

oscurece sus trazos y revive

en el instante exacto del florecimiento.

Camina por ciudades dulces y luminosas,

de suaves monumentos a la brisa,

develando el centímetro a su paso.

Ella, en su último rincón, aguarda,

Pasa los dedos por su cabello,

Lo mira a los ojos; se agazapa.

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